El suicidio de Celia Fuentes, bloguera de moda e influencer, tuvo lugar el 19 de septiembre de 2017. La joven valenciana se quitó la vida en su domicilio en Majadahonda (Madrid) a los 27 años de edad en el que fue su tercer y definitivo intento de suicidio.
Sus familiares y allegados la salvaron en dos ocasiones, pero finalmente sus episodios de depresión, los fracasos amorosos, la presión y el estrés laboral y el abuso de psicofármacos la llevaron a un callejón del que no vio más salida que la muerte. Su padre, un general del Ejército ya retirado, la encontró colgada de la escalera con una sábana.
Apenas 24 horas antes de su fallecimiento, la también modelo, con un cuarto de millón de seguidores en Instagram que envidiaban su estilo de vida, publicó en su perfil (que todavía hoy se puede visitar), una sugerente imagen en ropa interior donde aparecía durmiendo la siesta (simulando dormir, para ser más exactos) y que generó decenas de miles de «likes» y comentarios.
Ver esta publicación en Instagram
A quién le gusta dormir la siesta más que a mi? ☝🏼☝🏼☝🏼☝🏼 📸: @danphto
Celia Fuentes, que había estudiado Marketing en la Universidad ESIC de Madrid, saltó a la fama en España a raíz de su participación en «Quiero ser», un programa televisivo presentado por Sara Carbonero en el que conocidas blogueras como Dulceida, daban la «alternativa» a aspirantes a ser influencers. Ella abandonó ese espacio con polémica al criticar duramente el formato a través de un vídeo en Youtube.
En Argentina fue también muy popular por su supuesta relación con el político y sindicalista Facundo Moyano, con quien se vio envuelta en un presunto triángulo amoroso cuya tercera arista era la modelo Nicole Neuman.
«Lo mío es todo fachada», la verdad tras una vida de «likes»
«Ojalá estuviera bien, pero lo mío es todo fachada». Estas reveladoras palabras son las del último mensaje que la influencer envío a una de sus amigas, en el que evidenciaba que la imagen idílica que daba de su vida en las redes era una pose.
La muerte de Celia Fuentes provocó una fuerte conmoción en el mundo televisivo en España y abrió el debate sobre la presión que reciben o se autoimponen las nuevas figuras mediáticas catalogadas como influencers.
«El puto dinero, el postureo. Los putos likes y followers de una sociedad vacía que aparenta tenerlo todo pero no tiene puto nada. Celia te amo y siempre lo haré», escribía una amiga de Celia Fuentes tras enterarse del triste final de una chica «extremadamente sensible y voluble».
Su mejor amiga, Carmen, publicó un emotivo mensaje póstumo en Instagram donde afirma que «te fallé en el último y más importante momento en el que me necesitaste».
Si te ha interesado conocer la historia detrás del suicidio de Celia Fuentes, aquí puedes ver más sobre famosos que se suicidaron.